ADICCIÓN AL MÓVIL

Tienes adicción al móvil, no lo niegues ahora, lo mejor es reconocerlo, estás enganchada al móvil.

Consideramos que el teléfono móvil nos soluciona muchas tareas de nuestro día a día, pero ¿es cierto esto?

Todas tenemos un móvil más o menos moderno, con aplicaciones que utilizamos a menudo, echamos de menos tenerlo a mano y lo usamos mucho más que hace unos años.

Las redes sociales se han convertido en algo habitual y aplicaciones como whatsapp o telegram nos permiten comunicarnos de forma más rápida y económica.

Todo esto está muy bien, si lo usamos con cabeza, pero las nuevas tecnologías traen consigo nuevos problemas y uno de ellos es la nomofobia.

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¿QUÉ ES LA NOMOFOBIA?

La nomofobia es, dicho de forma coloquial, la adicción al teléfono móvil.

El no poder estar sin este aparato se está convirtiendo en un problema muy habitual.

Este nombre tan curioso surge de la abreviatura de la expresión inglesa ‘no-mobile-phone phobia’, que los expertos han definido como miedo a estar sin el teléfono móvil, y que catalogan como la enfermedad del siglo XXI.

Está claro que estar comunicado es algo importante, pero llegar a límites excesivos puede ser peligroso.

Según los estudios, además son las mujeres las que sufren con mayor frecuecia este tipo de fobia, concretamente un 70% de las mujeres reconoce tener pánico a perder su teléfono móvil, mientras que, en el caso de los hombres el porcentaje se queda en un 61%.

Entre los más jóvenes el problema se agrava ya que, al menos un 8% de la población universitaria padece esta fobia.

Te recomendamos que leas nuestro post sobre autoestima y pensamiento positivo.

SÍNTOMAS Y CONSECUENCIAS DE ADICCIÓN AL MÓVIL

Estar enganchada al móvil se manifiesta en multitud de síntomas como:

• Ansiedad
• Malestar general
• Enfado o inquietud
• Negación y/o minimización del problema
• Sentimiento de culpa
• Disminución de la autoestima…

Las consecuencias tampoco son nada despereciables, pueden acarrear problemas serios como, por ejemplo:

• Aburrimiento creciente con las actividades habituales de ocio
• Baja autoestima
• Problemas con la aceptación del propio cuerpo
• Déficit en habilidades sociales y en resolución de conflictos…

Además de estas consecuencias físicas, la dependencia del teléfono móvil puede causar problemas en tu vida diaria.

El hecho de estar constantemente pendiente del teléfono puede dañar tus relaciones sociales, y no te estés dando cuenta.

Tus relaciones amorosas también pueden verse afectadas.

La comunicación verbal es muy importante para cualquier pareja y, si pasas el día colgada del móvil, esa comunicación puede volverse nula.

Igual sucede en el trabajo, hay profesiones en las que llevar el móvil continuamente no es nada recomendable, imagina una peluquera cortando el pelo y hablando por whatsapp.

Evidentemente es una distracción que puede traer consecuencias.

Si además tener siempre el móvil encima tienes la necesidad de tener el último modelo, tu economía puede verse también afectada.

No son aparatos baratos y el tener la necesidad de comprar algo que realmente no necesitas puede ser muy nocivo.

Te recomendamos leas nuestra publicación sobre cómo recuperar la pasión con tu pareja.

LOS JÓVENES Y EL MÓVIL

No puede negarse que los niños de hoy nacen y crecen en un mundo digital, en el que más que tener miedo de las nuevas tecnologías, lo padres deben asegurarse del buen manejo de las mismas.

El cuándo debe darse un teléfono móvil a un menor es un debate peliagudo.

Hay muchos factores a tener en cuenta y la decisión dependerá de los padres del niño.

El Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, ha escrito un informe sobre el tema.

Este informe, llamado «Por el uso responsable de las nuevas tecnologías», puede ser de utilidad a la hora de resolver dudas sobre la edad apropiada para tener este tipo de tecnología.

En él recomienda una edad aproximada de 13 años como la adecuada para que un menor tenga teléfono móvil, aunque esta edad es origentativa, dependiendo de la madurez del niño y de otros muchos factores.

Como ves, no es cuestión de eliminar la tecnología de nuestras vidas y, mucho menos, de la de nuestros hijos, sino de adaptarnos a ellas y de adaptarlas a nuestra vida sin que lleguen a ocuparla del todo y a causar un problema serio.

Ya hablamos de los móviles y sus usos con unas adolescentes en nuestro podcast.

Lo que está claro, es que cada vez son más las personas afectadas por la adicción al móvil, sobre todo cada vez son más mujeres las que no pueden vivir sin el móvil y eso puede afectar a multitud de aspectos de su vida, tenga la edad que tenga.

Te recordamos que ningún elemento tecnológico podrá superar jamás tu encanto.

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