Cuida tu pelo en invierno con cosmética natural

Yo cuido mi pelo en invierno y en verano, pero los cuidados son distintos. Hablamos de temperaturas completamente opuestas y las horas de sol y luz del día tampoco tienen nada que ver.

Sin embargo, lo que no cambio es lavarme el pelo con champú sin siliconas, esto es completamente sagrado.

Tenemos a nuestra disposición el uso de cosméticos naturales, jabones y champús de ingredientes naturales, entonces ¿por qué no voy a usarlos?

Si respetan el medio ambiente y mejoran el estado y la salud de mi cuerpo y en este caso hablando de los champús, también el de mi pelo, pues vengo aquí y te lo cuento, porque estas cosas hay que compartirlas.

Motivos para comprar un champú natural

Parabenos, parafinas, siliconas, sulfatos y ftalatos. Un momento, no creas que me he equivocado al escribir la palabra, has leído bien, f-ta-la-tos.

Todo eso, es parte de lo que contienen los champús habituales e industriales. Y por si tienes la duda de ¿qué es el ftalato?, te resumo que es un compuesto químico que se utiliza como plastificador. Sí, sí, de nuevo has vuelto a leer bien, plastificador.

Vamos, que solamente por lo que te he contado en estos dos pequeños párrafos ya merece la pena coger el champú y tirarlo a la basura o regalárselo a alguna enemiga.

Por ejemplo, el champú que compré el otro día en Olimed Cosmetics, que era el que está recomendado para cabellos grasos como el mío, ¿qué contiene? romero, extracto de granada y aceite esencial de limón y menta.

¿Qué diferencia verdad? Y luego, ves mi pelo y lo tocas y está estupendo, y además yo me siento el cuero cabelludo sano, sin picores ni irritaciones.

¿Qué pasa con el pelo en invierno?

Por si no lo sabías, las mujeres que tenemos el pelo graso, en invierno lo tenemos más graso. Y muchas mujeres que no tienen el pelo graso, en invierno pueden notar como su pelo genera más grasa.

¿Los motivos? Los hábitos de lavado y secado, pero también el uso de gorros de lana, gorros sintéticos y los cambios bruscos de temperatura.

En invierno, si podemos, nos importa un poco menos pasar uno o más días sin lavar el pelo, hace frío y no nos apetece estar con la cabeza húmeda. ¿Y qué ocurre? Que nuestro cuerpo y en este caso la cabeza, sigue produciendo continuamente aceite, que es lo que denominamos grasa.

Esta grasa, es esencial para nuestro organismo, y protege nuestra piel, pero un exceso de ella no es bueno. ¿Qué ocurre por tanto con el pelo? Que si no lo lavamos correctamente, se mezcla el polvo del ambiente y la suciedad propia de tocarlo, con ese exceso de grasa a lo que hay que sumar que lo lavamos menos….‘et voilà’, el resultado es….un pelo feo.

¿Cómo debemos lavar nuestro pelo con un champú natural?

Lo primero de todo es lo que más fácil se te puede olvidar y lo que más pereza te dará, que es lavarte el pelo con agua tibia.

Es un error tremendo lavarse la cabeza con el agua muy caliente.

Ya sé que te apetece, lo sé, a mí también. Pero es muy malo para nuestra piel, porque se rompen las escamas de nuestro cuero cabelludo y en el proceso de regeneración es cuando nos aparece la caspa, otra de las consecuencias del pelo graso.

Agua tibia, y si tienes el valor de aclararte con agua fresquita aún mucho mejor.

Mi recomendación, y lo que yo hago, y me funciona muy bien. Me mojo el pelo con agua tibia, me lo lavo y froto con energía el pelo, que no el cuero cabelludo, con un poco de champú y lo aclaro con agua tibia igual.

Después, vuelvo a ponerme champú en la cabeza y me masajeo ya el cuero cabelludo con cuidado durante 2 o 3 minutos y lo dejo actuar, mientras tanto me lavo y froto el cuerpo, me exfolio la piel y me aclaro, y justo para terminar es entonces cuando me aclaro la cabeza con agua entre tibia y fresca.

Lo que viene después, es correr a coger la toalla y envolverme en ella.

Muchas gracias por leer nuestros artículos relacionados con la salud en nuestro blog.